Avance La Promesa capítulo 671 (martes 9 de septiembre): Las consecuencias llegan al palacio
La Promesa, capítulo 671: un episodio de venganzas, reconciliaciones y decisiones al límite
El próximo martes 9 de septiembre, los espectadores de La Promesa se adentrarán en un capítulo que marcará un antes y un después en las vidas de muchos de los personajes. La ficción de época de TVE, que se ha consolidado como una de las series diarias más vistas en la televisión española, regresa con su episodio número 671 cargado de tensión, emociones y giros argumentales inesperados.
Las repercusiones de los acontecimientos del día anterior comienzan a desplegarse con fuerza, revelando que en el universo de La Promesa ninguna acción queda sin consecuencia. Los protagonistas deberán enfrentarse a decisiones difíciles, a secretos que pesan como una losa y a la posibilidad de redimirse o, por el contrario, hundirse aún más en la oscuridad de sus actos.
El miedo de Adriano se materializa
La trama se abre con la figura de Adriano, completamente alterado por las recientes confesiones de su esposa, Catalina. Ella, en un arrebato de rebeldía, llevó a cabo una acción tan osada como peligrosa: depositar estiércol en la residencia del barón de Valladares, con la intención de humillarlo y vengar así viejas afrentas.
Aunque Catalina reconoce la imprudencia de su gesto, la confesión no hace más que intensificar el miedo de Adriano, quien teme que la represalia del barón no tarde en llegar. Y en efecto, las sospechas del joven parecen confirmarse: el barón de Valladares no es un hombre que soporte afrentas sin responder. Pero lo que nadie espera es que su reacción vaya mucho más allá de un simple contraataque. Su venganza será calculada, refinada y profundamente peligrosa, desplegando una red de consecuencias que podría afectar a todos los miembros de la familia.
La desesperación de Leocadia alcanza su punto máximo
Mientras tanto, en otro rincón del palacio, Leocadia se consume de angustia por la ausencia prolongada de su hija Ángela. El silencio, la falta de noticias y la incertidumbre sobre su paradero están minando la resistencia de la señora de Figueroa, que empieza a mostrar síntomas de desesperación cada vez más evidentes.
Lorenzo, el capitán que guarda la clave de este misterio, continúa dilatando las respuestas. Leocadia, sin embargo, ya no está dispuesta a esperar más. La presión que ejerce sobre él se multiplica, y su paciencia se agota a pasos agigantados. La pregunta que todos se hacen es: ¿hasta dónde estará dispuesta a llegar una madre para recuperar a su hija? Los próximos pasos de Leocadia podrían desencadenar un nuevo conflicto que pondría al descubierto las intrigas del capitán.
Curro diseña un plan arriesgado
En paralelo, Curro no permanece impasible ante la desaparición de Ángela. El muchacho, conmovido por la situación, traza un plan que, aunque valiente, podría convertirse en una trampa mortal para él. Su decisión es denunciar al capitán Lorenzo ante el sargento Burdina, con la esperanza de que una investigación oficial pueda desenmascarar al militar y, finalmente, liberar a Ángela.
El movimiento de Curro implica un enorme riesgo: si Lorenzo descubre sus intenciones antes de que el plan se ejecute, las consecuencias podrían ser fatales. Aun así, la determinación del joven muestra que está dispuesto a sacrificarlo todo por la justicia y por proteger a quienes quiere. El episodio promete colocar a Curro en una situación límite, donde su valentía se pondrá a prueba frente a un enemigo mucho más experimentado y despiadado.
La reconciliación entre Toño y Simona
No todo será oscuridad en este episodio. Entre tanto drama y tensión, surge un rayo de esperanza en el seno de la familia. Tras los secretos revelados por Candela a Toño en el capítulo anterior, sobre lo sucedido en el pasado con su padre y el esposo de Candela, se abre la puerta a la reconciliación.
Toño, al conocer la verdad, decide tender la mano a Simona y cerrar así las heridas que habían marcado su relación. Esta reconciliación es un momento de gran carga emocional que muestra cómo, en medio de tantas intrigas y conflictos, aún es posible la sanación de los lazos familiares. Enora observa con orgullo cómo esas cicatrices, que parecían imposibles de curar, empiezan finalmente a cerrarse.
La tiranía de Cristóbal se impone
En el área del servicio, sin embargo, la tensión sigue aumentando bajo la sombra del nuevo mayordomo, Cristóbal. Su llegada al palacio ha transformado la dinámica entre los criados en un auténtico campo de batalla. Santos, protegido por Cristóbal, aprovecha cada instante para atormentar a Ricardo, sometiéndolo a humillaciones constantes y empujándolo a una situación insostenible.
El favoritismo de Cristóbal hacia Santos no es casual; detrás de esta actitud se esconden intenciones más oscuras que pronto saldrán a la luz. Mientras tanto, Ricardo, cada vez más aislado y vulnerable, deberá decidir si continúa soportando el acoso o si encuentra la forma de resistir a la tiranía que se cierne sobre él.
La resaca de María Fernández y sus consecuencias
El episodio también nos mostrará el lado más humano y frágil de María Fernández. Tras una noche de excesos, la joven amanece con una resaca monumental y sin apenas recordar nada de lo sucedido. La vergüenza se apodera de ella cuando Teresa y Samuel le narran en qué condiciones regresó al palacio.
Este episodio podría afectar gravemente la relación que María mantiene con Samuel, ya que sus sentimientos hacia él son cada vez más evidentes y teme que esta imagen de debilidad empañe la percepción que el muchacho tiene de ella. Lo que comenzó como una noche de diversión, se convierte ahora en un motivo de conflicto interno y en una amenaza para un vínculo sentimental que apenas empieza a florecer.
El percance de Petra: un nuevo frente de conflicto
Los jardines del palacio serán escenario de un suceso inesperado cuando Petra sufra un accidente que, lejos de despertar compasión, agrava todavía más su tensa relación con Cristóbal. Lo que podría haber sido un incidente menor se transforma en una fuente de enfrentamiento directo entre ambos.
Este percance no solo refleja la fragilidad de la convivencia bajo el régimen autoritario de Cristóbal, sino que también revela cómo incluso los detalles más pequeños pueden convertirse en armas en un ambiente cargado de hostilidad y desconfianza.
Un episodio donde todo tiene consecuencias
El capítulo 671 de La Promesa subraya con fuerza una de las máximas de la serie: cada acción, cada palabra y cada secreto tienen un precio. El pasado se empeña en volver una y otra vez para reclamar cuentas, y los personajes deben enfrentarse a sus propios fantasmas, a veces encontrando redención, y otras, hundiéndose aún más en sus errores.
Entre la venganza refinada del barón de Valladares, la lucha de una madre desesperada por recuperar a su hija, el arrojo de un joven dispuesto a enfrentarse a un poderoso capitán, y las reconciliaciones familiares que muestran un rayo de esperanza, este episodio se perfila como uno de los más intensos y memorables de la temporada.
Cita con los espectadores
Los seguidores de la serie no querrán perderse esta entrega clave que se emitirá el martes 9 de septiembre a las 18:20 horas en La 1 de TVE. Con giros inesperados, emociones a flor de piel y personajes enfrentados a decisiones cruciales, La Promesa promete mantenernos una vez más al borde del asiento.
Porque en este universo de pasiones, intrigas y secretos, lo único seguro es que nada ni nadie volverá a ser igual después del capítulo 671.