Alain Hernández, Jesús en ‘Sueños de Libertad’: “Yo iba a estar un año en la serie porque sabía que sería muy duro”
La inesperada muerte de Jesús de la Reina: un antes y un después en Sueños de Libertad
La serie Sueños de Libertad ha dado un giro radical que ha dejado a la audiencia completamente descolocada. Uno de los villanos más poderosos y temidos de la ficción, Jesús de la Reina, ha muerto de manera repentina en los últimos episodios. Su desaparición no solo ha generado un sinfín de reacciones en redes sociales, sino que también ha marcado un punto de inflexión en la trama y en la vida de muchos personajes que orbitaban alrededor de él.
Detrás de este antagonista implacable se encontraba el actor Alain Hernández, quien durante más de un año dio vida al personaje con intensidad, sarcasmo y una profundidad que no pasó desapercibida. En una conversación sincera, Alain ha compartido cómo fue encarnar a Jesús y cómo recibió la noticia de su adiós definitivo en la serie.
El reto de interpretar a Jesús de la Reina
Para Alain, ponerse en la piel de Jesús supuso un desafío enorme. Desde el principio supo que no sería un papel cualquiera, ya que se trataba de un personaje central, un engranaje indispensable para que la mayoría de las tramas avanzaran con fuerza. “Ha sido todo un reto”, asegura el actor. “Sabía que implicaba una gran responsabilidad porque muchas historias dependían de él, y tenía claro que debía trabajar más duro que nunca. Llegué a memorizar entre 80 y 100 páginas de guion cada semana”.
La exigencia era enorme, pero también le ofrecía una oportunidad única: construir a Jesús desde cero, moldear cada gesto, cada mirada y cada palabra. “Me encantó darle la intensidad, la ironía y el humor que yo sentía que necesitaba el personaje. Siempre con el visto bueno de la dirección, por supuesto. Además, Jesús interactuaba con casi todos los demás personajes, y eso me permitió compartir secuencias con muchísimos compañeros y compañeras, lo cual fue un auténtico placer”.
Ser villano: entre el disfrute y el desgaste
Muchos intérpretes coinciden en que los papeles de villano son los más divertidos de abordar, pero Hernández matiza esta afirmación. “No sé quién dice eso”, comenta entre risas. “Sí, hubo momentos divertidos, sobre todo en las escenas cargadas de sarcasmo, pero en general ha sido muy duro. Me dio muchos dolores de cabeza preparar cada secuencia para que funcionara al máximo nivel”.
La dificultad no estaba únicamente en las maldades del personaje, sino en la exigencia emocional que requería. “Jesús necesitaba una intensidad constante. Había días en los que rodaba varias escenas seguidas de peleas, enfrentamientos y discusiones, y terminaba destrozado al final de la jornada. Y lo peor era que al llegar a casa aún me esperaba otra sesión de estudio de tres horas para preparar el día siguiente”. Un esfuerzo que, aunque agotador, también le permitió crecer como actor.
La salida de la serie: una decisión pactada
A diferencia de lo que podría parecer, la muerte de Jesús no pilló a Alain por sorpresa. Desde el inicio, él y el equipo habían acordado que su participación duraría alrededor de un año. El motivo principal era personal: “Tenía claro que iba a ser muy duro mantener ese ritmo más tiempo. Apenas veía a mis hijos un día y medio a la semana, y esa es una carga demasiado grande”.
Aunque Alain incluso propuso que no mataran a su personaje, con la idea de dejar abierta la puerta a un posible regreso, finalmente los guionistas optaron por darle un cierre definitivo. “Me dio pena, sobre todo por el personaje y por no poder seguir compartiendo escenas con mis compañeros, pero tampoco me sorprendió. Fue la decisión que consideraron más adecuada y la respeté”.
El impacto en la calle y en los fans
La popularidad de Sueños de Libertad es tal que Alain Hernández pronto comenzó a notar las consecuencias de encarnar al villano principal. “La frase que más escuchaba cuando me reconocían era: ‘¡Uy, qué malo eres! Pero qué bien lo haces, hijo…’. Me hacía mucha gracia porque era como un halago disfrazado. Aunque a veces había gente que me miraba con cierto rencor, como si realmente hubiese hecho todo lo que Jesús hacía en la serie. Eso me inquietaba, pero también me divertía”.
La capacidad del personaje para despertar emociones tan intensas entre los espectadores confirma la fuerza de su construcción. Y aunque a muchos les costará acostumbrarse a la trama sin Jesús, su legado en la historia será imborrable.
¿Quién tomará el relevo como villano?
Con la muerte de Jesús de la Reina, una pregunta inevitable surge entre los seguidores: ¿quién será el nuevo gran antagonista de la serie? Alain tiene su propia teoría. “Creo que Don Pedro, interpretado por Juanjo Puigcorbé, tiene todas las papeletas. Es un grandísimo actor y el personaje tiene el carisma necesario para ocupar ese lugar. Aunque, personalmente, apostaría por María, porque es un personaje que tiene muchos motivos para convertirse en villana y sé que Roser Tapias lo haría de maravilla”.
La desaparición de un villano siempre abre espacio para nuevas dinámicas, y Sueños de Libertad ha demostrado en más de una ocasión que sabe reinventarse para mantener al público enganchado.
Nuevos horizontes para Alain Hernández
Aunque Jesús de la Reina ya es parte del pasado, Alain Hernández no se detiene. Muy pronto podremos verlo en otra gran producción de Antena 3: Las hijas de la criada, adaptación televisiva de la novela homónima de Sonsoles Ónega, ganadora del Premio Planeta 2023. El proyecto, producido por Buendía Estudios, promete ser uno de los grandes estrenos de la temporada. “Estamos encantados con lo que se está rodando. La historia es apasionante y las sensaciones son muy buenas”, adelanta el actor.
Además, Hernández tiene en el horizonte una nueva película, aunque prefiere no dar todavía demasiados detalles. Tras la intensidad de un año en una serie diaria, reconoce que valora poder equilibrar mejor su vida profesional y personal: “Me entusiasma trabajar, pero ahora quiero también disfrutar más de mis pequeños. Esta nueva etapa me permite respirar un poco más”.
Un adiós que marca historia
La muerte de Jesús de la Reina no es solo la despedida de un personaje. Es el cierre de un ciclo que ha cambiado Sueños de Libertad para siempre. La intensidad, la crudeza y el magnetismo que Alain Hernández aportó al villano principal han dejado huella en los espectadores y en la propia narrativa de la serie.
El vacío que deja Jesús será difícil de llenar, pero también supone una oportunidad para que otros personajes den un paso al frente y ocupen ese espacio central en las tramas. Mientras tanto, el recuerdo de su mirada desafiante, de su ironía afilada y de su capacidad de manipulación seguirá vivo en la memoria colectiva de quienes semana a semana se dejaban atrapar por esta apasionante ficción.
Porque si algo ha demostrado Sueños de Libertad con este giro, es que no teme arriesgarse, sorprender y emocionar. Y, sobre todo, que cada capítulo puede cambiarlo todo en cuestión de segundos.