La Promesa en Gustav Televisión. Historias que contar

Hola, amigos, soy Gustav, y como cada domingo, estoy aquí para traerte los avances semanales de La Promesa, la novela que lidera las tardes en Televisión Española. Esta semana, del 27 al 31 de octubre de 2025, promete capítulos llenos de tensión, emociones encontradas y decisiones que cambiarán el rumbo de los protagonistas. Nos esperan los episodios 704 al 706, y aunque solo serán tres capítulos debido a la suspensión de la emisión el martes 28 y el miércoles 29, la intensidad no se reduce en absoluto.

El martes no habrá capítulo porque se emitirá el partido de fútbol femenino entre España y Suecia, mientras que el miércoles la programación estará dedicada al especial informativo por el aniversario de la catástrofe de Valencia causada por la Dana, con cobertura completa de los eventos y el funeral de estado en el Palau de Les Arts i les Ciències. Pero no te preocupes: aunque haya días sin capítulo, aquí en Gustav Televisión no te quedarás desinformado, y como siempre, te contaré todo al detalle.

Empecemos con Ángela Beltrán y el controvertido plan de Leocadia. Esta semana, la joven se encuentra atrapada entre la obediencia y la rebeldía. Siente que cada palabra de su madre, la astuta y calculadora Leocadia, es como una cadena que la arrastra un poco más hacia el abismo. Ángela intenta seguir los consejos de Curro, mostrándose amable con el capitán Lorenzo para que no sospeche del plan secreto que se está tramando, aunque la repulsión y el cansancio pesan sobre ella.

En medio de este conflicto, Beltrán comienza a ganarse la confianza de Ángela sin proponérselo, ofreciendo un respiro a la muchacha y generando una conexión que será evidente desde el primer capítulo de la semana. Este acercamiento no pasa desapercibido para Leocadia, quien, siempre calculadora, decide ofrecerle una dote generosa al joven abogado con la intención de sellar el acuerdo matrimonial y asegurarse de que nadie se adelante a sus planes. Sin embargo, este gesto despierta rumores en el palacio: algunos creen que Leocadia está comprando un marido para su hija, mientras que otros sospechan que oculta algo aún más grave.

El lunes veremos cómo la relación entre Ángela y Beltrán empieza a consolidarse con naturalidad, generando tensión y expectación, y al final de la semana, Beltrán tomará una decisión decisiva: aceptará casarse con Ángela. Pero la joven, con su lucidez intacta, impondrá una condición que dejará a todos sin palabras: desea pasar dos días a solas con Curro, lejos del palacio y de los planes de su madre, antes de consumar el enlace. Esta petición, arriesgada y cargada de emociones, plantea un desafío directo a Leocadia y podría cambiar el rumbo de todo lo previsto.

Paralelamente, la historia de María Fernández y el padre Samuel atraviesa un momento crítico. Tras la confesión más dura de su vida, María se enfrenta al remordimiento y la culpa. Le ha revelado a Samuel su embarazo, y aunque inicialmente la reacción del sacerdote fue fría y distante, el lunes todo cambiará. Samuel se acerca a ella con comprensión, le pide perdón por haberla juzgado y le confiesa que actuó movido por prejuicios, recordándole que, aunque su futuro le parezca sombrío, sigue siendo una persona valiosa y maravillosa.

Pía se convierte en un apoyo fundamental para María. La observa, la escucha y la guía, recordándole que lo que verdaderamente importa ahora es su decisión, no la opinión de los demás. Sin embargo, María, atrapada entre la vergüenza y la presión, tomará una decisión que será desgarradora: no seguirá adelante con el embarazo. Pía, con empatía, le anuncia que la partera Paca visitará a María en unos días y se ofrece a acompañarla, brindándole contención en un momento extremadamente difícil y convirtiéndose en un pilar de apoyo silencioso pero vital.

En otra parte del palacio, Petra Arcos se encuentra entre la humillación y la posibilidad de redención. La joven, aún recuperándose de su enfermedad, se enfrenta a la severidad de Leocadia, quien le ordena a Cristóbal ponerla a prueba. El lunes, el mayordomo ejecuta estas instrucciones con precisión: Petra recibe la noticia de que no podrá continuar en su puesto si no demuestra su valía en pocos días. La presión sobre ella es enorme, y aunque Pía interviene, intentando suavizar la situación, Cristóbal permanece inflexible, recordando que las reglas del servicio no se negocian. Petra se esfuerza más allá de sus fuerzas, pero su cuerpo aún no responde. Finalmente, confiesa la amenaza a Samuel, quien, fiel a su vocación, intenta defenderla ante el mayordomo. No obstante, la tensión aumenta y su futuro laboral sigue pendiendo de un hilo.

Martina y Jacobo atraviesan su propio drama romántico. La joven intenta recomponer su relación con una cena íntima, pero el intento termina en desastre: reproches, frialdad y un comentario de Jacobo que retumba en su cabeza: “He sido un bobo por creer que era especial para ti”. Martina queda paralizada, consciente de que su corazón ya no pertenece a Jacobo, sino a un recuerdo que la ata al pasado. La pregunta sobre si confesará lo que siente o seguirá atrapada en un compromiso sin amor mantiene a los espectadores expectantes y tensos.

Enora y Toño se enfrentan a un dilema entre la traición y el perdón. Manuel, en un giro sorprendente, decide darle a Enora una segunda oportunidad, reincorporándola al hangar. Toño, por su parte, sigue dolido y se debate entre el amor que siente por ella y la desconfianza causada por la traición. Simona trata de hacerle ver que todos cometemos errores y que, si realmente la ama, debería darle la oportunidad de explicar y redimirse. Enora, con arrepentimiento y esfuerzo, comienza a ganarse la confianza de algunos compañeros y les demuestra gratitud con un regalo especial a las cocineras, buscando reparar viejas heridas y restaurar cierta armonía en el servicio.

En el taller, Manuel recibe noticias alentadoras: cartas de empresas interesadas en su diseño de motor confirman que su proyecto, iniciado como un sueño, comienza a consolidarse como un éxito real. Pero con la prosperidad también llegan los celos, los riesgos y la presión de quienes buscan aprovecharse de su talento. Cada decisión, cada acción y cada palabra se convierte en parte de un juego de poder y ambición que define el destino de los protagonistas.

Por último, el misterio de la carta de Catalina sigue siendo un eje central de intriga. Leocadia confirma que la joven nunca pudo enviarla, y el varón de Valladares asegura que su contenido es imposible. Esto plantea la pregunta: ¿quién la redactó y con qué propósito? La señora de Figueroa empieza a sospechar de alguien cercano, quizás del propio servicio, y la sombra del engaño vuelve a amenazar el destino de la familia y del palacio. Como siempre, en La Promesa, las cartas, los secretos y las traiciones tienen el poder de cambiar vidas.

Así que, amigos, esta semana la novela se carga de emociones, decisiones cruciales, secretos que podrían estallar y giros que nadie espera. En Gustav Televisión estarás al tanto de todo, y yo te traeré cada detalle para que no te pierdas nada de lo que suceda entre los pasillos del palacio. Nos vemos en el próximo vídeo, y como siempre, un gran beso apretado de tu Gustav.