LA PROMESA AVANCES – ¡SANTOS PIERDE EL CONTROL! RICARDO DESTRUIDO POR UN DESCUBRIMIENTO INIMAGINABLE
La promesa avances, el velo rasgado, un matrimonio secreto, un aborto en el límite y la caída de una impostora
Lo que está por sacudir los cimientos de La Promesa no es simplemente otro episodio: es una auténtica detonación emocional que partirá la historia en dos. Una tormenta de revelaciones, mentiras que por fin se agrietan, decisiones imposibles y una red de secretos que amenaza con colapsar sobre todos los que viven en el palacio. Nada volverá a ser igual después de este capítulo.
El aparente final del enigma de las cartas de Catalina se convierte en el primer golpe de un efecto dominó devastador. Tras días de angustia, de esperanza contenida y de susurros temerosos, Leocadia comunica a los marqueses que las misivas no aportan ni una sola pista útil. La familia se queda petrificada, como si un manto de muerte cubriera el salón. Por fin aceptan lo impensable: Catalina podría seguir desaparecida para siempre. Pero lo que nadie sospecha es que detrás de este aparente fracaso se esconde la manipulación más cruel. Leocadia, la mensajera de malas noticias, es la autora del engaño, la mente que ha tejido una maraña de falsedades que empieza a deshilacharse. Su triunfo, silencioso y perverso, está a punto de venirse abajo.
Mientras los nobles intentan recomponerse, el verdadero terremoto se vive en los pasillos del servicio. María Fernández está hundida en un abismo emocional del que no sabe cómo salir. Su embarazo, lejos de traerle luz, la ahoga con un peso insoportable. Entre lágrimas y miedo confiesa su tormento a Pía, quien comprende al instante la gravedad del asunto. Samuel, al enterarse, queda impactado: María está contemplando seriamente la posibilidad de abortar. La tensión en la servidumbre se convierte en una cuerda tensa a punto de romperse. El episodio mostrará a María en una lucha feroz entre seguir adelante con su embarazo o dar un paso que podría destruirla para siempre. Su decisión se convierte en uno de los hilos más desgarradores de toda la trama.
Paralelamente, el amor prohibido entre Curro y Ángela toca su punto más crítico. Su viaje de despedida, ideado como una última bocanada de felicidad antes de separarse, termina siendo un tormento lento. Están destrozados, incapaces de sostener la distancia que Leocadia les ha impuesto como castigo invisible. Intentan cumplir la promesa de no buscarse, pero es inútil: cada mirada, cada recuerdo, cada gesto los empuja de nuevo el uno hacia el otro. Y por supuesto, la inevitable recaída llega. Su reencuentro furtivo es pura emoción, un desafío directo al destino. Pero también es una bomba de relojería: si Leocadia los descubre, el futuro de Curro en el palacio estará condenado.

Leocadia, en su obsesión por cerrar su plan antes de que alguien descubra su entramado de mentiras, se topa con un obstáculo inesperado: la invitación al aniversario del duque de Carvajal y Cifuentes, evento al que debe asistir toda la familia… justo el mismo día del matrimonio secreto entre Ángela y Beltrán. En lugar de aplazar la boda, Leocadia insiste con una terquedad inquietante en mantener la fecha. ¿Qué teme que salga a la luz si la ceremonia se posterga? Su desesperación es cada vez más evidente y Lorenzo, que ya sospecha de su extraña relación con Beltrán, comienza a presionarla con preguntas que ella intenta desviar con su habitual frialdad. Este enfrentamiento promete convertirse en uno de los choques psicológicos más intensos de la temporada.
Mientras tanto, Petra vive su propia caída. Degradada a simple sirvienta, llena de humillación y resentimiento, se siente traicionada por todos. Ni el apoyo de Pía ni el de Samuel logran calmarla. Herida en su orgullo, Petra se convierte en una amenaza latente, una pieza inestable que podría tomar decisiones impulsivas para recuperar el estatus perdido. Su humillación no es el final de su historia, sino el comienzo de una etapa mucho más oscura.
La guerra de las recetas robadas continúa alimentando tensiones en la cocina. Enora confiesa que ha pospuesto su boda por falta de confianza, hundiendo el ánimo de Simone y Candela. Vera, incapaz de frenar el plagio de Madame Cocot, se enfrenta a López y su pasividad incomprensible. La entrevista a la impostora en el periódico es una provocación que enciende aún más el conflicto. Hay algo que López oculta y la historia sugiere que lo que sabe podría cambiar por completo esta trama aparentemente trivial.
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Un rayo de esperanza surge para Teresa cuando Cristóbal, en una conversación reservada, le propone convertirse en la futura gobernanta de La Promesa. La noticia, un verdadero salto social, la llena de vértigo. Las responsabilidades del puesto son enormes, y el recuerdo de Petra, degradada y consumida por la rabia, la atormenta. ¿Debe aceptar el honor o temer las intrigas que vendrán con él? Su reflexión se convierte en uno de los momentos más humanos del episodio.
Sin embargo, el golpe maestro está en marcha. Jacobo, tras días de investigación silenciosa, encuentra algo: una anomalía en el papel, un trazo extraño, un detalle mínimo pero decisivo. Está convencido de que las cartas de Catalina fueron falsificadas dentro del palacio. Y si Jacobo logra demostrarlo, Leocadia caerá de una forma tan espectacular como definitiva. Pero su descubrimiento lo coloca en una situación peligrosa: revelar la verdad podría poner en riesgo tanto su posición como su seguridad. Este dilema moral marca uno de los puntos más tensos del episodio.
La llegada del rey al aniversario del duque añade un nuevo nivel de presión. Adriano, aún marcado por la sombra de Catalina, se niega a asistir, pero Alonso insiste en que este evento podría ofrecerles una oportunidad única. La presencia del monarca podría desencadenar secretos ocultos durante años.
Todo culmina en un clímax devastador. Curro y Ángela, incapaces de soportar la distancia, rompen su pacto y se encuentran de nuevo, fundiéndose en un abrazo prohibido que desafía a la razón y al miedo. Es el clímax emocional del episodio y, al mismo tiempo, la antesala del peligro. Si alguien los ve, todo estará perdido.
Y mientras el amor intenta sobrevivir, la sombra de Leocadia se alarga, cada vez más frágil, cada vez más expuesta. Jacobo está a un paso de desvelar toda su farsa. La máscara de la impostora está a punto de caer.
Y cuando caiga… arrastrará consigo a todos los que se atrevieron a confiar en ella.