LLEGA BELTRÁN: ¿EL NUEVO AMOR DE ÁNGELA? || CRÓNICAS de #LaPromesa #series
En la serie La Promesa, nada parece detener el ritmo de los acontecimientos, ni siquiera cuando el palacio entero se encuentra envuelto en un clima de tristeza por la grave enfermedad de Petra Arcos. En medio de esta atmósfera sombría, una nueva figura aparece para agitar los corazones y cambiar el curso de las vidas de los personajes: Beltrán. Su llegada promete traer consigo un torbellino de emociones, dudas, y tal vez, el nacimiento de un nuevo amor que podría alterar el destino de Ángela de Figueroa para siempre.
El nombre de Beltrán empieza a resonar con fuerza en los pasillos de La Promesa. Se trata de un personaje nuevo, un hombre joven, encantador, de modales refinados y un aire misterioso. Todo apunta a que podría convertirse en el nuevo interés amoroso de Ángela. Su irrupción en la historia no solo añadirá un toque de frescura, sino que también encenderá las chispas de un posible triángulo sentimental que pondrá a prueba las lealtades y los corazones de varios personajes.
Según los avances oficiales, Beltrán llega de la mano de Jacobo, el prometido de Martina, más conocido entre los espectadores como “San Jacobo”. Aparentemente, Beltrán es amigo de este joven y viaja con él hasta el palacio. Desde su primera aparición, se percibe en él una elegancia natural, una mezcla de educación y sensibilidad que lo diferencia de otros hombres que han pasado por La Promesa. Es culto, respetuoso y parece tener un profundo sentido de la justicia, lo que llama la atención de Ángela desde el primer instante.
Su primer encuentro con Ángela se produce casi por casualidad, aunque más de uno sospecha que el destino tiene algo que ver. Ángela se ofrece a recoger al nuevo huésped del palacio, mientras el capitán Lorenzo de la Mata —el temido “capitán Garrapata”— insiste en acompañarla. Sin embargo, fiel a su espíritu independiente, Ángela logra escabullirse y parte sola hacia el punto de encuentro. Allí, entre caminos de tierra y bajo la brisa del campo andaluz, los dos jóvenes se cruzan por primera vez.
Beltrán la saluda con respeto, pero con un brillo de curiosidad en la mirada. Ella, prudente y reservada como siempre, mantiene su elegancia y compostura, aunque no puede evitar sentirse intrigada por aquel desconocido. A medida que conversan, descubren afinidades inesperadas: ambos comparten ideales similares, un profundo sentido del deber y una necesidad de libertad que los une sin que lo sepan. Esa conexión inmediata parece encender una chispa que ninguno podrá ignorar.
Para Ángela, este encuentro supone un punto de inflexión. Durante meses ha vivido atrapada entre el amor imposible que siente por Curro y el compromiso impuesto con el capitán Lorenzo, un matrimonio que solo busca fortalecer alianzas familiares. Sin embargo, la llegada de Beltrán introduce una nueva posibilidad: la de ser amada y comprendida sin condiciones. Por primera vez, Ángela vislumbra un futuro distinto, uno en el que podría seguir los dictados de su corazón y no los de su madre, doña Leocadia.
Beltrán representa todo lo que Ángela ha soñado: un hombre de su misma generación, con educación, valores y sensibilidad. No es un soldado arrogante ni un noble soberbio, sino alguien capaz de escucharla y tratarla como a una igual. Con él puede hablar sin miedo, compartir pensamientos y sentir que su voz es valorada. La aparición de Beltrán, en ese sentido, simboliza para ella un soplo de aire fresco, una oportunidad para romper las cadenas que la atan a un destino impuesto.
Pero como suele suceder en La Promesa, cada rayo de luz trae su sombra. Si bien la relación entre Ángela y Beltrán parece florecer, el triángulo amoroso que se avecina promete causar estragos. Curro, todavía profundamente enamorado de ella, no renunciará fácilmente, y el capitán Lorenzo tampoco está dispuesto a dejar escapar a su prometida. Todo apunta a que los próximos capítulos estarán marcados por los celos, los secretos y las intrigas.

En medio de todo esto, doña Leocadia vuelve a desplegar su habitual habilidad para manipular los hilos del destino. Al conocer a Beltrán, su mirada cambia por completo: percibe en él una oportunidad perfecta para librarse del incómodo compromiso con Lorenzo y asegurar un matrimonio más ventajoso para su hija. Rápidamente, empieza a trazar un nuevo plan. Su mente maquiavélica idea un futuro en el que Ángela y Beltrán se casen, alejándola de Curro y deshaciéndose del capitán sin levantar sospechas.
No obstante, las verdaderas intenciones de Beltrán aún son un misterio. ¿Es tan puro y desinteresado como parece, o guarda secretos que podrían poner en peligro la tranquilidad del palacio? Muchos se preguntan si detrás de su sonrisa amable se oculta algo más profundo. Lo cierto es que, hasta ahora, nadie sabe mucho sobre su pasado ni sobre las razones exactas que lo han llevado a La Promesa.
Mientras tanto, Curro se encuentra en una situación complicada. En el episodio más reciente, fue sorprendido por doña Leocadia cuando rebuscaba entre sus pertenencias y sostenía en las manos uno de sus collares. Aunque la escena generó gran tensión, los avances no mencionan consecuencias graves, por lo que todo apunta a que el malentendido se resolverá rápidamente. Sin embargo, este incidente podría marcar un antes y un después en su relación con la mujer que tanto desprecia.
En los próximos episodios, Leocadia pedirá a Curro un favor muy especial, uno que pondrá al joven ante un dilema moral. Se tratará de un gran sacrificio que podría afectar no solo su futuro, sino también el de Ángela. La manipulación de Leocadia alcanza niveles insospechados, y parece dispuesta a utilizar a todos a su alrededor para conseguir sus objetivos.
Así, la llegada de Beltrán no solo traerá romance, sino también conflicto, celos y decisiones difíciles. Su presencia servirá como catalizador de una nueva etapa en la historia, una donde los sentimientos se mezclan con la traición y las ambiciones. La Promesa, fiel a su estilo, promete mantener a los espectadores en vilo, con giros inesperados y emociones intensas.
El destino de Ángela, Curro y Beltrán se entrelaza en un juego peligroso donde el amor, la lealtad y el poder se enfrentan en cada escena. Lo que comenzó como una simple llegada podría convertirse en la chispa que incendie todo el palacio. Y mientras tanto, los espectadores solo pueden preguntarse: ¿será Beltrán el nuevo amor de Ángela… o el comienzo de su nueva tormenta?