¡Sueños de libertad! ¡Gabriel huye y abandona Begoña! Avance 432

Gabriel se marcha y Begoña queda sola: el principio del fin

¡Hola a todos los seguidores de Sueños de Libertad! El capítulo del martes 4 de noviembre llega cargado de emociones, despedidas y nuevas amenazas para la colonia. Gabriel, incapaz de soportar la culpa y los recuerdos que lo atormentan, abandona a Begoña con la promesa de “arreglarlo todo en París”, aunque su verdadera intención es huir de un pasado que lo consume. Lo que parecía una misión empresarial se convierte en una huida disfrazada, un intento desesperado de dejar atrás el amor y los errores que marcaron su destino. Pero su partida deja un vacío imposible de llenar: Begoña, embarazada y destrozada, se enfrenta al miedo de un futuro incierto mientras todo su mundo se desmorona.

El episodio arranca con un clima de tensión palpable tras la jugada maestra de Brossard. Damián, encolerizado, descarga toda su furia contra los Merino, culpándolos de la venta de Perfumerías De la Reina. En el salón familiar se desata una tormenta de reproches. Los viejos lazos de sangre se desgarran mientras los hijos intentan justificar lo injustificable. Damián golpea la mesa y jura que jamás permitirá que los franceses destruyan lo que generaciones levantaron con sudor y orgullo. Pero su furia no logra tapar la realidad: el poder ya no le pertenece.

En el taller, Tasio vive uno de sus peores momentos. Se siente culpable, temeroso de haber decepcionado a su padre y de ser responsable de la caída del imperio familiar. La presión lo consume. Sabe que los franceses pronto tomarán control total y que su papel como líder será cuestionado. En la colonia, las conversaciones giran en torno a la llegada de las órdenes francesas y al miedo generalizado por los cambios.

Mientras tanto, Luz, siempre pragmática, da de alta médica a Damián. Aunque celebra su recuperación, le pide calma y reposo. La conversación deriva hacia el proyecto de Gaspar, quien junto a Claudia intenta levantar una cooperativa para producir su crema artesanal. Sin embargo, en la cantina, los trabajadores se muestran escépticos. Desconfían de la idea de invertir en ungüentos naturales cuando la fábrica está al borde del colapso. Gaspar intenta convencerlos, pero sus palabras se pierden entre miradas de duda.

Avance semanal de Sueños de libertad: Gabriel se lanza y... ¡besa a Begoña!

Marta, por su parte, busca refugio en su diario. Después de la confesión de Digna, sus pensamientos son un torbellino. Siente remordimiento, miedo y una ternura que no logra ordenar. Las palabras de su tía resuenan en su mente: verdades sobre el pasado que la obligan a mirarse en el espejo con nuevos ojos. Más tarde, un encuentro casual con Pelayo la hace reconsiderar su postura. Tal vez no todo esté perdido, tal vez el perdón aún sea posible.

En el laboratorio, Luis teme por su futuro. La llegada de los franceses amenaza con alterar por completo el modo de trabajo y la identidad artística de Perfumerías De la Reina. Aunque intenta mantenerse positivo, en su interior teme que su pasión por los aromas se diluya entre órdenes extranjeras y números fríos. Cristina, su compañera, intenta animarlo. Ella, optimista, cree que los franceses no serán tan crueles como todos piensan. Pero la realidad pronto demostrará que se equivoca.

El capítulo del lunes cierra con una escena desgarradora: Gabriel se despide de la familia. Anuncia que viajará a París con la excusa de revertir el contrato de Brossard, pero en realidad su propósito es escapar de todo. No soporta ver a Begoña, ni recordar la culpa que lo persigue. Damián lo despide con desconfianza, María observa con lágrimas contenidas, y Begoña apenas puede mantenerse en pie. Cuando el tren parte, ella comprende que Gabriel no volverá. Su marcha la deja sola… y con una vida creciendo en su interior.

El martes, la historia da un giro inesperado. La colonia despierta sacudida por la llegada de una desconocida. Su nombre es Chloé Dubois, una mujer francesa elegante, enigmática y de modales tan refinados como implacables. Su sola presencia revoluciona el ambiente. Marta y Pelayo la observan desde la distancia, intrigados por su seguridad y su porte extranjero. Pronto descubren que no es una simple visitante: Chloé es la nueva representante de Brossard en Toledo. Su misión es reestructurar la empresa, imponer nuevas reglas y eliminar los últimos rastros del legado De la Reina.

Mientras tanto, en la casa grande, Damián revive los recuerdos de su vida pasada. Observa un viejo álbum de fotos y siente el peso de la pérdida. Todo lo que alguna vez amó —su esposa, sus hijos, su fábrica— parece haberse desvanecido. Manuela, al verlo tan vulnerable, se atreve a un gesto de consuelo. Le toma la mano, le ofrece una palabra de aliento, un silencio compartido que lo humaniza. Por un instante, el muro entre amo y servidumbre se desmorona, dejando entrever un afecto sincero.

En el hospital, Begoña finalmente se reencuentra con Andrés. La emoción la desborda. Él, al verla, sonríe como si el tiempo no hubiera pasado. Quiere empezar de nuevo, volver a ser el hombre que una vez fue. Pero pronto Begoña descubre la verdad más cruel: Andrés ha perdido la memoria. No recuerda nada de su compromiso con Gabriel ni del embarazo. En su inocencia, él habla de un futuro juntos, sin saber que el pasado los separa irremediablemente. Begoña, incapaz de romper su ilusión, decide callar. Prefiere cargar sola con la culpa antes que destruirle la esperanza.

De vuelta en la colonia, los efectos del contrato con Brossard comienzan a sentirse. Los empleados temen despidos, algunos ya empacan sus pertenencias. La crisis se extiende como un veneno silencioso. Gaspar le comunica a Luz que la propuesta de financiación ha sido rechazada. Su sueño de fabricar cremas artesanales se desvanece. Luz, sin embargo, promete no rendirse. “Mientras tengamos manos, habrá esperanza”, le dice.

Avance semanal de Sueños de libertad: Begoña desvela su pasado a Gabriel...¡y  pasa su primera noche con él!

En otro rincón, Claudia enfrenta una urgencia: la cuidadora de la Casa Cuna ha renunciado sin aviso. Con los niños a su cargo y los problemas multiplicándose, busca desesperadamente una sustituta.

En la fábrica, Chloé continúa su inspección con la precisión de un bisturí. Cada palabra suya es una orden disfrazada de cortesía. Marta y Pelayo perciben algo inquietante en ella: no solo domina el idioma y la empresa, sino también a las personas. Incluso Joaquín se siente fascinado por su magnetismo. Gema y Digna lo notan y lo miran con desconfianza.

Esa tarde, Begoña regresa a casa, confundida y con el alma rota. Digna y Luz notan su angustia, pero ella miente, asegurando que su malestar se debe a una discusión con el padre Agustín. Sin embargo, Digna no le cree. Cansada de las intromisiones del sacerdote, decide enfrentarlo directamente. En una escena cargada de fuerza, lo acorrala y le exige respeto. El cura, humillado, se queda sin argumentos ante la dignidad de una mujer harta de ser juzgada.

La jornada termina con un nuevo golpe: Tasio recibe la noticia de que su cargo será eliminado por decisión de los franceses. Todo por lo que luchó queda reducido a nada. Mientras los De la Reina celebran la recuperación de Andrés sin sospechar la ruina que los acecha, Marta recibe una carta desde prisión. El remitente: Eladio. En ella, el recluso le pide una cita urgente, asegurando que tiene información crucial sobre Santiago. Marta, temblando, comprende que su vida —y la de toda la familia— está a punto de cambiar para siempre.

Así cierra un capítulo intenso, donde las despedidas y los secretos se entrelazan. Gabriel parte dejando tras de sí un rastro de dolor, Begoña enfrenta sola el peso de la verdad, y la llegada de Chloé marca el inicio de una nueva era en Sueños de Libertad: una era en la que el amor, la ambición y la traición volverán a chocar… hasta destruir lo poco que aún queda en pie.