VALLE SALVAJE CAPÍTULO 277: ¿JOSÉ LUIS EXPULSARÁ a VICTORIA de la CASA GRANDE tras la TRAGEDIA?

Enora desaparece y Curro afronta nuevo sacrificio

En el capítulo 698 de La Promesa el calmado esplendor del palacio se rompe por mil grietas: lo cotidiano se tiñe de misterio, las certezas se tambalean y las decisiones imposibles vuelven a poner a prueba a quienes habitan la casa. Una carta trae viejas heridas a la superficie, una joven ingeniera se esfuma sin explicación y, en medio de todo, Curro recibe una exigencia que amenaza con destrozarlo para siempre.

La mañana había comenzado con una luz tibia que acariciaba los tejados y las ventanas del caserón, pero la apariencia serena era solo un velo. Cuando el cartero dejó un sobre con la caligrafía de Catalina, el rumor de su llegada se extendió sin estridencias por los salones: no era una nota íntima sino una misiva formal dirigida a la familia Luján. En el salón azul, entre miradas contenidas y respiraciones aceleradas, Martina leyó la carta en voz alta. Para Leocadia y algunos familiares, el mensaje fue un alivio: Catalina está recibiendo cuidados, se recupera, pidió espacio para sanar. Para Adriano —que esperaba en cada frase una señal, un guiño, una confesión de cariño— la misiva fue un frío muro. Las palabras de calma sonaban a despedida; la distancia que Catalina proclamaba dejó a Adriano hecho añicos, convencido de que aquel “tiempo para mí” escondía un final.

Valle Salvaje”: José Luis expulsa a Victoria del Valle tras descubrir su  traición (avance capítulo 273, viernes 10 de octubre)

Mientras las emociones se debatían en el salón noble, en otra parte del caserón se tejía un peligro distinto. El hangar convertido en taller era un hervidero de entusiasmo y aceite: el prototipo del aeroplano avanzaba bajo manos empeñadas. Manuel y Toño trabajaban con la complicidad de los que sueñan en voz alta; Enora era el motor incansable, perfeccionista hasta la obsesión. Pero la ambición técnica se torció en un instante: un resbalón, una llave que cae, un corte profundo en la muñeca. La herida obligó a Enora a retirarse, herida y avergonzada, dejando el taller con una mano vendada y la frustración clavada en el pecho.

Esa misma noche, sin embargo, la joven no volvió a su habitación. Al día siguiente su cama estaba impecable, sus cosas intactas. Nadie la había visto marcharse. La alarma reemplazó la preocupación: la brillante artífice había desaparecido sin nota ni pista. Manuel y Toño, primero incrédulos y luego angustiados, rastrearon el taller y la casa; nada. El prototipo quedó como testigo mudo de su ausencia, una estructura a medio construir que parecía vigilar la ausencia de su artífice. La desaparición de Enora agregó una sombra nueva y espesa al ambiente: ¿accidente, huida o algo mucho peor?

En otra línea de conflicto, Teresa alcanzó a Vera en un ajuste de cuentas que terminó por romper lo que quedaba de su amistad. Las mentiras de Vera —una historia fabricada sobre una familia inexistente— estallaron en el rostro de Teresa. Las acusaciones fueron duras, el dolor profundo. Cuando Lope intentó mediar, su esfuerzo chocó con la desconfianza reciente; Teresa, lastimada, cerró la puerta que podría haber abierto el diálogo. Una relación que prometía se vino abajo por el peso de ocultamientos y medias verdades.

Y en el corazón roto de la casa estaba Curro. Desde que Leocadia le impuso la primera humillación —la petición de separar a Martina de Adriano— el joven había vivido en un estado de angustia constante. Su amor por Ángela y su lealtad hacia su familia quedaron enfrentados a una orden que le parecía una monstruosidad. Se sentía marioneta de una mujer que conocía bien sus sombras y las utilizaba como instrumentos. Cada paseo por los jardines, cada noche en vela, acrecentaban su sensación de ser un Judas a punto de traicionar lo que más quería.

La presión subió cuando Leocadia, lejos de conformarse, anunció que la prueba no había terminado. Si Curro no era capaz de sembrar la duda entre Martina y Adriano, entonces debía hacer algo aún más terrible: renegar de Jana, su madre, ignorarla hasta quebrarla, fingir desprecio a la hermana que lo había acompañado en la búsqueda de su identidad. Era una alternativa sádica y despiadada: sacrificar su propio refugio emocional para proteger un secreto que la señora de Figueroa guardaba como arma. La posibilidad de infligir ese daño a quien más amaba dejó a Curro paralizado ante una elección que no parecía tener salida honrosa.

Valle Salvaje Capitulo 277 Lunes 13 de Octubre AVANCE - Vídeo Dailymotion

El chantaje moral que Leocadia ejercía puso en evidencia la crueldad con la que maneja los hilos del poder en la casa: no solo inquiere sobre lealtades, sino que diseña escenarios donde cualquier camino elegido devora a quien lo transita. Curro, acorralado, buscó consuelo en la soledad de la fuente seca; su mundo interior se pareció, por un momento, a la habitación vacía de Enora: un hueco que nadie llenaba.

En paralelo, el drama menor y cotidiano de la casa —la recuperación de Petra, las consultas con el doctor Salazar— dejó asomar a personajes como Samuel, que toma notas y observa, consciente de que las piezas de la historia forman una red más vasta. Sus charlas clínicas con el médico son mucho más que un expediente: son un ancla, un intento de fijar una versión de los hechos en un entorno donde la verdad se diluye con facilidad.

El episodio termina como empezó: con preguntas abiertas. La carta de Catalina, que para algunos trae alivio y para otros dolor; la huida sin rastro de Enora; la ruptura entre Teresa y Vera; la coacción moral que vuelve a aplastar a Curro. Nada está resuelto y todo parece pronto a estallar. La Promesa deja a su público en vilo: ¿aparecerá Enora sana y salvo? ¿Admitirá alguien el chantaje que retuerce las vidas del servicio? ¿Podrá Curro resistir la prueba que Leocadia le impone sin perder lo que le queda de su alma?

Un capítulo de decisiones imposibles, silencios que gritan y sacrificios que aún no han concluido. La casa respira contenida; el otoño en Los Pedroches observa, implacable, cómo se tejen nuevas trampas alrededor de los corazones.